Se trata del primero destinado a los pacientes que no hayan respondido favorablemente al tratamiento con antivirales de acción directa, que impiden que el virus se multiplique.
Se trata de Vosevi, un nuevo fármaco que el Ministerio de Sanidad ha incluido en el plan estratégico frente a la hepatitis C, de la farmacéutica Gilead, que hoy ha informado sobre la ampliación de medicamentos para abordar la que fue hasta 2016 una de las principales causas de muerte a nivel mundial.
Según los estudios realizados, Vosevi cuenta con una eficacia del 95 % y a él podrían optar los pacientes en los que han fracasado otros tratamientos, que son entre el 3 y el 5 %.
Es el primer fármaco preparado específicamente para una segunda línea de tratamiento, según ha explicado el jefe de la Unidad de Aparato Digestivo de la Fundación Hospital Alcorcón, Conrado Fernández.
Esta compuesto por tres principios activos: el sofosbuvir (que está integrado en todos los medicamentos de este laboratorio para tratar la hepatitis C), velpatasvir y voxilaprevir.
El tratamiento es de una pastilla al día durante doce semanas.
Pero además de Vosevi, Sanidad ha ampliado el uso de otro fármaco de este laboratorio, el llamado Epclusa (sofosbuvir más velpatasvir).
Lo había incluido ya para tratar a los pacientes en fase 2 y 3, pero desde hoy pueden acceder a él todos los enfermos y su eficacia, según Frederico da Silva, director del área de hepatitis de la compañía, es cercana al cien por cien.
Epclusa viene por tanto a sustituir a otros dos fármacos de la compañía, según Da Silva, a Sovaldi (sofosbuvir) y Harvoni (sofosbuvir más ledipasvir).
Con todos estos tratamientos ya se han podido curar en el mundo a más de 1,6 millones de pacientes.
El ámbito terapéutico es en estos momentos muy amplio en España, según Fernández, y ahora se trata de avanzar en el control de los de los grupos vulnerables al virus, como pueden ser personas que han utilizado drogas por vía parental, que tienen conductas sexuales de riesgo o que se han sometido a una transfusión antes de 1991.
Y esto es importante porque se estima que en España hay 200.000 enfermos de hepatitis C y alrededor de 60.000 no lo sabe, de ahí la necesidad de ahondar en la identificación de esos pacientes que lo desconocen para avanzar en la prevención.