«A los avances médicos hay que exigirles que se puedan universalizar» José María Alustiza. Radiólogo
País Vasco - Aunque muchos crean que son cosa del pasado, aún se hacen sangrías con las que se trata a pacientes con exceso de hierro en el hígado. Un remedio sencillo para una dolencia difícil de diagnosticar. Un grupo multidisciplinar liderado por el radiólogo José María Alustiza (Legazpi, 1969) lleva desde 1998 investigando la forma de detectar la enfermedad mediante la resonancia magnética. Y lo han logrado, de forma que no es preciso realizar invasivas biopsias. Una prueba sencilla y de fácil aplicación en países con menos recursos. Un modelo gestado en el Hospital Universitario Donostia y Osatek que le ha valido a Alustiza, director de investigación de enfermedades hepáticas de Biodonostia, el reconocimiento de la Sociedad Española de Radiología Médica.
- ¿Qué ve un radiólogo en una resonancia magnética? ¿Todo?
- Todo no, pero sí muchas cosas, y cada vez más. Por ejemplo, el hígado está muy cerca de los pulmones, y si uno respira se mueve, por lo que es preciso que el paciente no respire. Así que, de tope, tienes como mucho 20 segundos. En los inicios de la resonancia se hacía imposible pensar que en ese tiempo pudieras estudiarlo. Hace 10 años nadie pensaba que todas las máquinas del mundo pudieran analizar el hígado, ni se sospechaba. Es increíble ver adónde hemos llegado.
- Le acaban de premiar por un estudio que empezó en 1998
- Sí, entonces arrancamos con el objetivo de medir si hay exceso de hierro en el hígado mediante resonancia magnética. De esta forma se beneficia mucho al paciente, porque se evita la biopsia hepática, que es un método más invasivo. A lo largo de la investigación han ido surgiendo problemas y hemos ido encontrando soluciones. Una cosa nos ha llevado a la otra.
- Su investigación beneficia a enfermos de hemocromatosis. ¿En qué consiste esta dolencia?
- La forma más importante es la hereditaria, pero también se da en pacientes que deben recibir muchas transfusiones de sangre porque sufren anemias o por trasplantes de médula. Ello lleva a un acúmulo de hierro que genera lesiones irreversibles y que reduce la expectativa de vida en 10 años. En pocos años ha cambiado la perspectiva sobre esta enfermedad, en la que apenas se pensaba hace varias décadas. Ahora hay nuevos tratamientos que han dado actualidad a la importancia de conocer exactamente la cantidad de hierro, para saber cómo tratar el problema.
Por Ane Urdangarin - En: Diario Vasco - San Sebastián - junio 2012 - Nota completa En la nota encontrarán también un video reportaje al radiólogo José María Alustiza