- Antinucleares: Presentes en el 60 por ciento de las hepatitis autoinmunes (HAI) tipo I. Muy baja especificidad en el diagnóstico.
- Antimúsculo liso: Dirigidos contra antígenos del citoesqueleto incluyendo la actina. Están presentes en el 70 por ciento de las HAI tipo I y en el 30-40 por ciento de las tipo III.
- Anti-LKM-I: Dirigidos contra el citocromo P450 IID6. Se encuentran en el 100% de las HAI tipo II.
- Anti-antígeno citosólico específico hepático (LCI): Asociado al tipo II. Dirigido contra una proteína citosólica hepática de 58 kD. Podría tener un papel patogénico debido a que sus niveles descienden cuando la enfermedad mejora con el tratamiento.
- Anti-antígeno soluble hepático (SLA): Presentes en prácticamente el 100 por cien de las HAI tipo III.
- Anti-hígado-páncreas (LP): Asociado al tipo III. Dirigido contra distintos antígenos citosólicos no órgano específicos.
- ANCA: Dirigido contra varios antígenos, entre ellos la actina. Se encuentra en el 75-90 por ciento de las HAI tipo I y en una frecuencia desconocida en los otros tipos. Es un marcador pronóstico de baja especificidad.
- Anti-receptor de la asialoglicoproteína (ASGPR): Presente en el 80-85 por ciento de las tipo I. Posiblemente, este receptor es el antígeno diana de la enfermedad.