Catalunya, Barcelona - Investigadores de la Unidad de Virología Molecular de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona ha identificado tres proteínas responsables de la multiplicación del virus de la hepatitis C, lo que permite abrir nuevas vías de estudio para lograr la fabricación de un antiviral de amplio espectro.
La investigación, que se publica hoy en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences' ha estado dirigida por la investigadora Juana Díez, y ha contado con la participación de dos grupos de investigadores alemanes, informó la UPF en un comunicado.
El descubrimiento tiene una "gran relevancia", porque hasta la fecha todos los antivirales desarrollados están dirigidos contra las proteínas virales, y por tanto quedan limitados por la mutación y la generación de variantes resistentes.
Los virus son pequeños parásitos intracelulares que dependen de la célula para su multiplicación, ya que necesitan las proteínas de ésta para completar su ciclo de vida. Las proteínas Lsm1, Rck/p54 y PatL1, halladas por los científicos de la UPF, son el vehículo utilizado por el virus de la hepatitis C para su expansión y no están sujetas a variación, por lo que conseguir un fármaco que las neutralice permitiría acabar con la enfermedad.
Díez y su equipo han demostrado que la multiplicación del virus de la hepatitis C, junto con la de otros dos virus del mismo grupo que afecta a bacterias y plantas, dependen de estas tres proteínas y, al mismo tiempo, son factores que se han mantenido estables a lo largo de la historia evolutiva.
El descubrimiento abre nuevas y "esperanzadoras" perspectivas para el desarrollo de antivirales de amplio espectro, ya que la investigación ha demostrado que la eliminación transitoria de estas tres proteínas inhibe la multiplicación viral, en un proceso que no es tóxico para la células.
Por el momento los resultados se han obtenido con células hepáticas humanas en cultivos celulares, y ahora deben extenderse a modelos animales, para comprobar si efectivamente podría ser una solución para las más de 170 millones de personas infectadas en el mundo por el virus de la hepatitis C, y que por tanto se encuentran en situación de riesgo de desarrollar enfermedades como la cirrosis o el cáncer de hígado.
EuropaPress Catalunya - julio 2009 - Nota completa