Comenzaron con actividades en 11 ciudades: Sao Paulo, Santos, Rio de Janeiro, Brasília, Belo Horizonte, Belém, Manaus, Porto Velho, Rio Branco, Recife e Florianópolis.
En ellas promueven actividades para llevar a la conciencia de que deben realizarse exámenes de sangre gratuitos a la población para detectar la incidencia del mal.
Consideran que esa grave enfermedad viral afecta actualmente a más brasileños que el SIDA HIV y sin embargo pudiera evitarse acudiendo masivamente a vacunarse en puestos de salud.
Los galenos insisten en que la hepatitis B se transmite por vía sexual, partos o por compartir instrumentos cortantes o de higiene personal, y ya afecta a más de dos millones de brasileños.
Alertan que la enfermedad no tiene cura, puede permanecer en el organismo por mucho tiempo y genera tumores en el hígado por lo que es importante un diagnóstico precoz.
Se ha determinado que los Estados con mayor incidencia de la enfermedad en Brasil son los de Roraima, Amazonas, Acre y Rondónia.