Crecieron los transplantes de órganos en la Provincia de Buenos Aires

A poco más de un mes de iniciado el 2009, ya se realizaron 101 donaciones de órganos en todo el país, de las que 29 corresponden a la Provincia de Buenos Aires, según indicaron desde el Centro Único Coordinador de Ablación e Implante de la provincia de Buenos Aires (CUCAIBA). "La cantidad de donantes crece paulatinamente y el tema de la donación de órganos tiene que estar instaurado en el seno de cada una de las familias", resaltó Clemente Raimondi, director del organismo, en diálogo con Info Región.

"La cantidad de donantes crece paulatinamente y Argentina tiene los mayores índices de donación de Latinoamérica. Todavía nos falta mucho para llegar a un estándar medio de 20 a 25 donantes por millón de habitantes, pero el incremento es muy positivo", afirmó Clemente Raimondi, director del organismo, en diálogo con Info Región. Y detalló: "Hubo veintinueve donantes en la Provincia y eso posibilitó que se realicen quince transplantes renales, seis hepáticos, un transplante pulmonar, uno renopancreático y seis cardíacos. El 30 por ciento de los donantes del país que se registraron hasta el momento fueron de Buenos Aires".

En ese contexto, sostuvo que una de las causas por las que se dio el crecimiento fue por la creación del programa federal de procuración que realizó el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI) y la incorporación de los coordinadores hospitalarios de transplantes. Éste último es un médico que proviene de las especialidades de emergentología o terapia intensiva y está capacitado para el proceso de la procuración de órganos.

Además, la puesta en marcha del sistema informático "Sintra" (Sistema Nacional de Transplante) hizo que el proceso fuera "todavía más transparente".

"El sistema Sintra aporta transparencia a toda la operación, porque el mismo paciente tiene acceso a los datos y es una forma de autocontrolar en qué proceso de donación se encuentra. La información luego pasa al papel, para ser fiscalizado por los organismos competentes de cada una de las jurisdicciones, entre las que está el CUCAIBA", remarcó Raimondi. Y dijo: "El coordinador hospitalario tiene una primera función que es la de colaborar con el paciente y contribuye con el médico de terapia a hacer todo lo posible para salvar la vida de cada uno de los enfermos".

En tanto, Raimondi aseguró que la clave para incentivar a los ciudadanos a que sean donantes tiene dos aristas. Por un lado la "información" y por el otro, "que se instaure el tema en el seno de las familias".

"Desde el ministerio de Salud y el CUCAIBA luchamos para paliar la falta de información, porque consideramos que es una de las formas para que se incrementen las procuraciones. Además, el tema tiene que estar instaurado en el seno de las familias y cada persona debe expresar su voluntad", afirmó Raimondi. Y agregó: "El grupo familiar tiene que manifestar la decisión que tomó la persona antes de fallecer, es por ello que si se hablan de estas cosas la gente no tendrá dudas a la hora de realizar una donación, aún cuando no concuerden con la determinación que tomó su ser querido".

A pesar de que tomar una decisión de esas características en un momento de sumo dolor puede ser una situación difícil para los familiares de un posible donante, el especialista aseveró que también "funciona como un bálsamo ante el sufrimiento".

"Está comprobado científicamente que ante la pérdida de un familiar, la donación de órganos produce una sensación de alivio entre los allegados. Donar, mitiga el dolor", explicó a este medio.

Es importante destacar que la mayoría de los órganos donados provienen de pacientes que sufren patologías neurológicas severas, traumatismos de cráneo, accidentes cerebrovasculares, tumores o lesiones cerebrales irreversibles por anoxia.

"El 2008 fue el año en el que mayor cantidad órganos y tejidos se procuró en los últimos diez años; ya que en el 2007, sólo 107 personas fueron transplantadas, mientras que al año siguiente se hicieron 184 procesos", aseguró.

A la hora de dirigirse directamente a los lectores de Info Región, el presidente del organismo brindó un mensaje: "Hoy puedo ser yo el que necesite un órgano, mañana vos y pasado tu mamá o tu mejor amigo. La realidad es que cualquiera de nosotros tenemos muchas más posibilidades de necesitar un transplante para seguir viviendo que transformarnos en donantes. Entonces, ¿Quién se negaría a recibir ayuda para continuar con vida?. Y, llegado el caso, ¿Por qué decimos que no, cuando se nos pregunta de ser donantes?".

Inforegión - 05 de enero de 2009 - Leer la nota completa

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