"Es indispensable que alguna autoridad médica tome la iniciativa y le diga a los ciudadanos que están protegidos por las autoridades --afirmó Carmen Flores, presidenta de DP--. No es posible que el hospital se exima de toda responsabilidad obligando a los pacientes a firmar un documento en el que consienten todo lo que les pueda ocurrir".
La dirección médica del Vall d'Hebron explicó el pasado jueves que las familias de los niños que acceden a sesiones de hemodiálisis suscriben, al inicio, un documento en el que asumen los riesgos e incidencias de que pueden ser objeto al recibir dicha asistencia. Los pequeños en cuestión forman parte del programa de trasplante de riñón de Vall d'Hebron, y reciben sesiones de diálisis a la espera de que surja un órgano que les sea compatible.
EL RIESGO
Según los expertos consultados, el documento que el hospital presenta a las familias para que lo firmen alude exclusivamente a las incidencias que puedan surgir por someterse a una diálisis, ya que se trata de un acto en el que la sangre sale y entra del cuerpo, y eso implica un riesgo. "Pero es una sobreinterpretación inadmisible decir que esos documentos se refieren también a la eventualidad de que el niño sufra un contagio de hepatitis C", dijeron.
La asociación DP pidió a Soria que indague qué tipo de consentimientos se obliga a suscribir a los pacientes. "Si esos documentos lo amparan todo, significa que estamos completamente indefensos", añadió Flores.
La Associació Catalana de Malalts d'Hepatitis C exigió ayer que la Conselleria de Salut profundice en la investigación de este contagio, y que no cierre el caso sin haber hallado una explicación completa sobre lo ocurrido. "El tema no está cerrado para los niños contagiados, ni para los miles de enfermos que padecemos esta enfermedad", añadió Josefina Butxaca, presidenta de la entidad. La asociación ofreció su apoyo a los padres de los niños que reciben diálisis en el hospital del Vall d'Hebron, unas familias notablemente intranquilas estos días, a las que el hospital no está ofreciendo ningún tipo de ayuda psicológica.
EL SÃNDIC NO ACTÚA
La consellera de Salut, Marina Geli, que considera el caso cerrado, informó ayer de que el Síndic de Greuges no tiene previsto abrir, de oficio, ninguna investigación para esclarecer el origen del brote hepático del Vall d'Hebron. Geli aseguró que así se lo anunció ayer por la mañana el propio Síndic, Rafel Ribó, en una llamada telefónica.
"Ribó está a la espera de recibir la información que le enviaremos la próxima semana, para analizarla", añadió la titular de Salut durante la inauguración del CAP de Riudarenes (Selva), informa Anna Punsí. En opinión de Geli, "tampoco no tendría ningún sentido una investigación judicial". La consellera tiene previsto informar a los grupos parlamentarios la próxima semana sobre lo sucedido en el Vall d'Hebron. Geli dejó abierta la posibilidad de comparecer en el Parlament con el mismo fin.
El Periódico 11 de diciembre - nota