Odontología , hepatitis c y tratamiento interferón ribavirina

LA IMPORTANCIA DEL CIRUJANO DENTISTA EN LOS PORTADORES DEL VIRUS DE LA HEPATITIS C ( HCV ).
La actuación y la importancia del cirujano dentista para evitar complicaciones bucales durante la terapia de tratamiento en la hepatitis C es tratarlas cuando estas se manifiestan.

Tenemos como inicio del protocolo en el tratamiento odontológico la realización de una radiografía panorámica ( radiografía específica para el estudio de las alteraciones bucales ) , donde podemos ver si hay patologías pre-existentes antes del inicio del tratamiento de la hepatitis C así como en los transplantes hepáticos.

A través de esta radiografía serán detectadas las dolencias de boca : caries , periodontitis (inflamación de las encías), restos radiculares ( raíces dentarias ), incrustación calcárea ( sarro) etc. Estas dolencias deberán ser tratadas, pues así estaremos disminuyendo la posibilidad de complicaciones futuras, como por ejemplo , los abscesos odontogénicos, que debido a la inmunodeficiencia del paciente, podrían ser letales y tener que ocasionar la suspensión del tratamiento iniciado.

Antes del tratamiento de la hepatitis (interferón y ribavirina) o del transplante hepático, se debería hacer una profilaxis dentaria y la adecuación del medio bucal, o sea una renovación de placa bacteriana ( película amorfa, o film invisible que contiene bacterias).
Deberá ser realizada con un equipo odontológico específico, preferiblemente a través de ultrasonidos y con sustancias antisépticas.

El tratamiento de la hepatitis C (interferón y ribavirina) presenta como efecto colateral la xerostimia (boca seca) escasez de saliva , que se presenta viscosa y pastosa , dificultando la capacidad de hablar, comer tragar y usar prótesis. La saliva normal posee también componentes anti-microbianos (lisozima, lactoperoxidase, glicoseoxidase, lactoferrina ), que reducen las bacterias, favoreciendo una protección a los dientes. Así pacientes xerostómicos son propensos a la formación de placa bacteriana y a la acumulación de residuos alimentarios, lo que resulta en una predisposición a la formación de caries.

El cirujano dentista deberá realizar aplicaciones tópicas de flúor y orientar al paciente para la práctica diaria de enjuagues con sustancias fluretadas, favoreciendo así la remineralización del esmalte dentario.

Es de extrema importancia la relación entre el médico que trata de la hepatitis y el cirujano dentista pues durante el tratamiento de la hepatitis puede acontecer algún problema de origen odontogénico, el caso deberá ser analizado por los dos especialistas de forma conjunta verificando riesgos y beneficios y por supuesto, encontrando la mejor solución.

Los pacientes portadores del virus de la hepatitis C ( HCV ) debido a las características de su tratamiento se vuelven inmunodeprimidos, o sea, son infinitamente mas susceptibles a infecciones y complicaciones bucales.

Conclusión : Revisando el caso de la terapia pro-hepatitis o en los transplantes hepáticos ,siempre deberá ser consultado un cirujano dentista competente.

Informaciones del Dr. Marcos Caminha P. Monteiro
Jefe de la sección de Estomatología-Odontológica y Prótesis del Instituto Nacional del Cáncer - Río de Janeiro - Brasil
Consultor Científico Interno

Fuente - Optimismo - Brasil
Traducción de Margot Pelayo (España)

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