Hepatitis C, una carrera contra el tiempo

hcv_virus_hepatitis_cFrancia - En los próximos 3 a 5 años, los hospitales verán concurrir cada vez más personas enfermas, afectadas por cáncer del hígado o por cirrosis avanzadas, consecuencias de infecciones por el virus de la hepatitis C (HCV), muchas de estas personas contagiados/as hace más de 20 o 30 años.

Los epidemiólogos consideran que el número de enfermos va a llegar a su máximo en poco tiempo, es por un cálculo matemático sencillo: el pico de transmisión del virus se sitúa alrededor del fin de los años 1980, seguido de un periodo de latencia de 20 a 30 años, el tañido debería sonar alrededor de 2015. Porque es un hecho bien establecido, la trasmisión del virus en la población mundial sucedió aproximadamente entre los años 1970 y los años 1980.

Porque precisamente en este periodo? Por oportunismo del virus de la Hepatitis C. Transmisible por la sangre, el HCV aprovecho el desarrollo exponencial del recurso de las transfusiones, pero también de la multiplicación del número de personas usuarias de drogas inyectables. Ahora bien, durante este periodo, nadie pudo parrarlo" porque nadie lo conocía.

Finalmente, desenmascarado en 1989, el HCV va a ralentizar su loca carrera en muchos países, los que desarrollaron campañas de prevención de la transmisión en los hospitales y en los centros de transfusiones, y que se comprometieron en campanas de intercambios de jeringas para las personas usuarias de drogas. Este primero éxito permitió a los científicos acumular conocimientos sobre el virus.

Hasta el momento, el tratamiento clásico anti-HCV se parece algunas veces a una pesadilla. Pero la buena noticia, es que los medicamentos nuevos y los que seguirán, muestran posibilidades de una eficacia cerca al 100%!

Para Jean Michel Pawlotsky, director del Centro Nacional de Referencias de las Hepatitis B, C y D, en el Hospital Henri-Mondor de Créteil (Francia), el periodo actual se puede comparar a la revolución de las triterapias en el tratamiento del sida.

Como en los tratamientos contra el VIH, las moléculas anti-HCV determinan etapas muy precisas de su replicación. En su línea de visión: 3 enzimas, verdaderos soportes de la multiplicación viral: la proteasa, indispensable en la maduración de proteínas del virus en construcción; la polimerasa, que sin ella el virus no puede fabricar su material genético a la célula infectada; y por fin, el complejo de moléculas NS5A, que es uno de los centros reguladores de la polimerasa.

Estas clases diferentes de moléculas van a permitir concebir multiterapias que ataquen al virus en varios frentes al mismo tiempo. Ya, en la emergencia de combatir los genotipos para los cuales los tratamientos clásicos son menos eficaces, las dos primeras antiproteasas (boceprevir y telaprevir) salieron en el mercado al fin de 2011. Añadida a la biterapia estándar, hacen subir la eficacidad del tratamiento a un 80% contra el virus de genotipo 1. Lamentablemente, tiene el agregado de nuevos efectos indeseables.

Del lado de los grandes laboratorios farmacéuticos, la batalla es conseguir la combinación molecular más poderosa, la más sencilla de seguir y la mejor tolerada. Porque las empresas aspiran al mismo objetivo: dejar definitivamente el interferón y la ribavirina. Algunas moléculas probadas sobre cohortes de enfermos ya mostraron una eficacidad que no era posible imaginar hace 5 años, el virus volviéndose indetectable en algunos días. Entre estas moléculas las más prometedoras, el daclatasvir (anti-NS5A) y el asunaprevir (anti proteasa) permitieron más del 90% de curación en las personas que nunca habían estado tratadas antes, sin interferón ni ribavirina. El mismo resultado para el danoprevir (antiproteasa) y la mericitabina (antipolymerasa). Llegar al 100% de curaciones no es más una utopía. Sobre todo que la puesta a disposición de quienes lo necesiten de una parte de estas moléculas en desarrollado esta prevista en los 3 años próximos.

Una nueva estrategia se perfila. Hay que detectar masivamente para curar la hepatitis C sin demoras. Detectar para curar con los medicamentos cuando estén disponibles. Lo que está en juego es importante. Se trata que la revolución que se anuncia no deje nadie en el costado de la carretera. Porque los virus contra cuales la inteligencia humana ha encontrado un freno eficaz no son muchos. Y la hepatitis C será nada menos que la primera infección viral crónica que sabremos curar sistemáticamente. Una buena noticia para la epidemia que se anuncia.

Traducción y adaptación realizada por Marie Anne David de Fundación HCV Sin Fronteras, para Hepatitis 2000 – Artículo escrito por Renaud Persiaux, en el periódico L’Union-L’Ardennais - Publicado el 06/01/2012 – LINK

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