- Los indígenas amazónicos de Perú comenzaron hoy a debatir las medidas que tomaran para enfrentar la epidemia de hepatitis ``B'', que habría ocasionado la muerte a 70 personas de las comunidades nativas Candoshi y Shapra.
En julio pasado se registraron 70 muertos a causa de la enfermedad, pero el tema recién se conoció a finales de octubre en Lima, debido a la lejanía e incomunicación en que se encuentran los nativos.
El dirigente nacional de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva, Henderson Rengifo, dijo a periodistas que los nativos están en una situación muy vulnerable debido al abandono del Estado peruano.
Los indígenas ``no reciben beneficios estatales y siguen siendo sujetos de agresiones a sus derechos a la vida, salud, diversidad étnica y cultural, medio ambiente, territorio, consulta previa, acceso a los recursos naturales y autodeterminación'', indico.
Rengifo sostuvo que el gobierno de Alan García, en vez de proteger a los nativos, ``persiste en su política energética que atenta contra los derechos de los pueblos'', al haber otorgado la concesión de 12 lotes petroleros en zonas protegidas.
``Somos un país mayoritariamente indígena y sin embargo quieren hacernos creer que somos minoría, y que por ello debemos someternos a lo que señalen estas supuestas grandes mayorías'', indico.
A ese panorama se suma el abandono en materia de salud, entre los que destaca la hepatitis, que se da por el contagio y la falta de cloración del agua que consumen en las comunidades aborígenes.
Sin embargo, llamativamente, el ministro de Salud, Oscar Ugarte, descarto que la hepatitis sea una amenaza contra las comunidades en la región amazónica de Loreto y negó que exista un brote epidémico, que seria el responsable de la muerte de 70 nativos.
SDP Noticias - 02 noviembre 2010 - nota completa