Cuando el VIH no es lo único

España, Málaga - Al año de inyectarse droga y de compartir jeringuillas con otros, el adicto ya ha hipotecado su salud. En esos doce meses, no sólo ha castigado su cuerpo con una sustancia altamente dependiente, también ha podido granjearse un nuevo compañero de por vida: el VIH. Pero hay más: el 30% de los enfermos de sida comparten el virus con el de la hepatitis C, según datos del grupo de estudio de enfermedades infecciosas del Hospital Clínico de Málaga. Una combinación peligrosa y, en ocasiones, mortal. «El hígado es la principal causa de muerte en los enfermos de sida con hepatitis C», asevera el doctor Jesús Santos. Son, en su mayoría, pacientes varones y de unos cuarenta años.

Se trata de un nuevo reto médico ya que, hasta hace una década, la hepatitis era un problema secundario al no estar controlado el VIH. «Los afectados morían antes de sida», afirma Santos. Hoy, la Medicina ha logrado mantener a raya el síndrome de inmunodeficiencia adquirida, por lo que el mal del hígado adquiere ahora una mayor importancia. El equipo malagueño trabaja de cerca con estos enfermos para buscar la mejor combinación en los tratamientos y evitar efectos adversos. «Tiene cierta complejidad. Son pacientes especiales porque tienen más riesgo de progresión de la hepatitis C que la población general y más riesgo de toxicidad hepática con los fármacos», explica el doctor.

En la actualidad, el proceso que sigue un VHC -como se denomina a los coinfectados- es el mismo que el de un paciente sin VIH, incluso llegan a entrar en lista de espera de trasplante si el tratamiento no obtiene resultados. Algo impensable unos años atrás.

Diario Sur - Málaga - 23 de marzo de 2009 - Leer la nota completa

Salir de la versión móvil