En ensayos clínicos la molécula pasó por 60 mil controles de certificación
Fermin Ruiz y Thomas Schreitmueller, directivos del laboratorio Genentech en San Francisco, explicaron a MILENIO que una de las cualidades del medicamento llamado Mericitabine es que la molécula tiene la capacidad de enlazarse con las células asesinas (causantes de la enfermedad) al grado de destruir el virus, sus tumores, y todas sus reacciones adversas. "Son como balas mágicas que matan células malignas de forma directa", comentó Ruiz.
Se trata de medicina personalizada que, según detallaron los investigadores en una conferencia, contó con un amplio grupo de pacientes de origen hispano y europeos. En los estudios se detectó que este tipo de moléculas producidas a partir de proteínas, combinadas con drogas tradicionales, tienen mayor efectividad en la cura de un padecimiento que en México hasta 80% de los afectados ignora que lo tiene.
De 100 personas infectadas con hepatitis C, según datos epidemiológicos en México de la Secretaría de Salud, 85 van a desarrollar infección crónica; 70 enfermedad hepática crónica; 20 tendrán dos o tres décadas después cirrosis; y hasta cinco morirán al año por cirrosis o cáncer de hígado.
Pero a diferencia de otros tratamientos, precisó Schreitmueller, este biotecnológico tiene mayor eficacia en atacar el genotipo 1 de la enfermedad, además de que no causa anemia y disminuye la inflamación, lo que permite una pronta cura y mejor calidad de vida.
También logra erradicar algunos efectos como fatiga, fiebre, nausea, dolor muscular, fibrosis, piel amarilla, orina obscura y hemorragias espontáneas.
En los ensayos clínicos el fármaco pasó por 60 mil controles de certificación, comparado con los 4 mil que se requieren en el desarrollo de medicamentos convencionales, y esto se debe a lo complejo del proceso de cultivo de células.
Se trata de una terapia costosa pero comparada con la carga económica que representa para el sector salud atender a los enfermos en etapas avanzadas, resulta hasta 50% más barata.
"De acuerdo con cálculos basados en las cifras de prevalencia, se estima que la incidencia de Hepatitis C en México equivale a 19 mil 300 casos nuevos cada año, de los cuales sólo entre 30 y 40% son susceptibles de recibir tratamiento, lo cual da un carácter de prioritario a la necesidad de llevar a cabo acciones que permitan mejorar el acceso", planteó Schreitmueller.
Por su parte "Voces contra la Hepatitis" envió una solicitud al Seguro Popular para que en diciembre se tenga una respuesta favorable para incluir a los enfermos dentro del catálogo.
Se trata de una enfermedad silenciosa y que cuando se tienen síntomas es ya demasiado tarde, incluso una persona puede haber portado el virus por más de 30 años, por lo que su hígado está tan dañado que muchas veces se detecta cuando la única solución es un trasplante.
Otro problema es que en 90% de los recién nacidos "”cuyas madres están infectadas y no lo saben"” la infección avanza de forma crónica, por lo que la ONG sugirió llevar a cabo pruebas de anticuerpos a las embarazadas que tienen factores de riesgo, para evitar el desarrollo del padecimiento en el recién nacido.
También los trabajadores del sector salud están expuestos al contagio, pues en México se registran alrededor de 360 mil accidentes punzocortantes entre ellos, principalmente enfermeras, internistas y personal de mantenimiento, que a la hora de inyectar, manejar hojas de bisturí en alguna intervención quirúrgica y entrar en contacto con agentes biológicos de un paciente enfermo, o al lesionarse pueden contraer hepatitis B o C.
- Claves
La enfermedad
- Según el Instituto Nacional de Salud Pública las entidades con mayor prevalencia de Hepatitis C son: Baja California, Nayarit, Morelos, Yucatán, Jalisco, Durango, Oaxaca, Quintana Roo, Chihuahua, Sinaloa y Tamaulipas.
- Los factores de riesgo más importantes son las relaciones sexuales con diferentes parejas sin protección, uso de drogas intravenosas y la realización de tatuajes o piercing sin asepcia.
San Francisco, EU - Blanca Valadez
Diario El Milenio - México - Octubre 2011 - nota completa http://www.milenio.com