Prensa - Santa Fe

Este artículo fue puesto en la red por Santa Fe Ciudad , agradecemos a ellos y al diario La Nación que dio la noticia.

Hepatitis C: sólo el 2% de los infectados sabe que la padece
Fecha Martes, 10.02.04
Tema Información de Salud
La consideran una bomba de tiempo viral. Su contagio superaría cinco veces al del sida. En la Argentina habría 800.000 afectados. En el mundo se calcula que esa cifra alcanza a los 170 millones de personas.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la hepatitis C es una "bomba de tiempo viral".
Su contagio, estima la OMS, es cinco veces superior al del HIV, con alrededor de 170 millones de personas infectadas, casi el 3% de la población mundial. A ellas, cada año se suman entre tres y cuatro millones de casos nuevos y más del 75% de los portadores crónicos del virus (HCV) pueden desarrollar cirrosis o cáncer de hígado, cuya mortalidad es cien veces superior a la de los pacientes sin HCV.

En el país, según la Organización Hepatitis C 2000, de Pinamar, habría hasta 800.000 personas infectadas. Sin embargo, sólo el 2% lo sabe.

"La hepatitis C es la principal causa de trasplante y representa casi el 50% de todas las causas de internación por enfermedades del hígado descompensadas, como la cirrosis", explica el doctor Rubén Terg, jefe del servicio de Hepatología del Hospital de Gastroenterología Bonorino Udaondo.

"Desde el punto de vista epidemiológico, los datos de los bancos de sangre en la Argentina, a los que asiste la población "sana", indican que la incidencia de la hepatitis C es del 1,5% -agrega-. Inversamente, entre los pacientes con HIV, el 90% de los exámenes para detectar hepatitis C dan positivo debido a que la vía de transmisión es similar a la del HIV." En cambio, y a diferencia de lo que ocurre con la hepatitis B, el nivel de transmisión por vía sexual es bajo.

Sin síntomas

La ausencia de síntomas lleva a que este mal sea subdiagnosticado o detectado tardíamente. "Cuando el paciente tiene síntomas, probablemente está en estadios muy avanzados", dice el doctor Terg.

En la mayoría de los casos, la presencia del virus se detecta cuando los análisis clínicos de rutina incluyen un hepatograma. Sin embargo, la derivación al hepatólogo se produce sólo cuando las alteraciones en los análisis son demasiado elevadas; es decir, cuando la evolución del virus se encuentra en la etapa terminal, como la cirrosis con descompensación.

Habitualmente, desde el contagio hasta la consulta especializada pueden pasar hasta 20 años. "Esto es lo que se llama un "iceberg": vemos la punta, que son los pacientes que vienen a la consulta con análisis muy alterados o con síntomas de una enfermedad hepática -explica el especialista-. Pero por debajo hay miles de enfermos a los que no se les detecta la enfermedad."

Para el doctor Terg, el retraso del diagnóstico responde a varias causas: "Primero, el médico clínico debe estar atento a las mínimas alteraciones de los análisis. Muchos pacientes que llegan al hepatólogo con un diagnóstico de hepatitis C traen estudios de diez años antes, con alteraciones en los resultados, pero sin la interpretación clínica adecuada y oportuna para evitar el avance de la enfermedad".

En segundo lugar, según Terg, se encuentra la falta de una adecuada política de salud pública que se ocupe de este mal. Hay que tener en cuenta que el 80% de las personas que se contagian pueden transformarse en portadores crónicos de un virus y que esto plantea un problema sanitario grave.

"No es para inquietar, pero la hepatitis C es hoy la principal causa de trasplante y la mitad de los enfermos que se internan lo hacen por una enfermedad del hígado descompensada", sostiene.

Una de las barreras para luchar contra la hepatitis C es, sin duda, el elevado costo de la medicación, que en un año puede alcanzar a los 40.000 pesos.

"El tratamiento de la hepatitis C no sólo es muy complejo por sus efectos secundarios, sino también muy costoso, y lamentablemente el Estado no lo cubre, como sí ocurre con el sida -señala el doctor Terg-. No hay un plan nacional de tratamiento de la hepatitis C que ayude a los pacientes sin cobertura médica y facilite a todos el acceso a los medicamentos."

Hoy en día, con los nuevos fármacos disponibles, entre el 50% y el 80% de los pacientes pueden curarse. "Pero sin tratamiento, los costos que estos pacientes demandarán al sistema de salud son infinitamente mayores", opina Terg, desde la experiencia que da el trabajo diario en el hospital público.

El especialista también opina que conocer de antemano el genotipo del paciente (su constitución genética) ayudaría a reducir la duración del tratamiento y, por lo tanto, reducir los costos. "En la ciudad de Buenos Aires, un paciente sin recursos, con mucha suerte puede hacerse un estudio del virus en el Hospital Muñiz -asegura-. En cambio, si se conociera el genotipo, que permite conocer la respuesta al tratamiento, seis meses de medicación bastarían."

Tomar conciencia

Pero para poder avanzar en la prevención de la hepatitis C es indispensable crear conciencia de su existencia y de su propagación silenciosa.

Por eso, la Organización Hepatitis C 2000 realizará la Travesía HCV 2004, que partirá el 25 de este mes desde Pinamar y llegará hasta Santiago, Chile.

Con el lema de "A favor de la información como vacuna y por una salud digna sin fronteras", pacientes con hepatitis C, médicos y familiares cruzarán la Cordillera de los Andes a caballo y en camioneta.

"Lo silencioso de la enfermedad, para los pacientes, es que no se habla de ella -afirma Eduardo Pérez Pegué, al que le diagnosticaron la enfermedad en 1999 y luego de curarse fundó la entidad-. Con esta travesía queremos utilizar la única vacuna disponible, que es la información temprana."

"En la Argentina, las estadísticas son muy imprecisas porque no hay campañas de detección -destaca-. La enfermedad se detecta cuando una persona tiene un accidente o, en algunos casos, cuando el médico le pide diversos exámenes a una mujer embarazada."

La clausura de la travesía será el próximo 5 de marzo, a las 19, en la Iglesia de Santo Domingo, en Buenos Aires. Quienes deseen informarse pueden hacerlo por la dirección electrónica hepatitis2000.org/travesia.html .

Salir de la versión móvil