De Ecuador a Colombia buscando un trasplante hepático, y no lo puede obtener

Luz María Suárez (46 años), es una de las decenas de pacientes que requiere un trasplante hepático en Ecuador.

Hace nueve años fue diagnosticada con cirrosis autoinmune, enfermedad que tornó su piel amarillenta y le impide realizar esfuerzos físicos. Además, le provoca que ningún medicamento actúe bien sobre su organismo.

En agosto de 2008 su delicado estado de salud le obligó a buscar atención en Medellín (Colombia), el sitio más cercano en donde se realiza ese procedimiento ya que en el país (Ecuador) no existe el tratamiento debido a la falta de infraestructura.

"El médico dijo que tengo seis meses para ser intervenida. Pero no tengo los $70 mil que cuesta la cirugía", relata la mujer, quien lleva siete meses buscando apoyo gubernamental sin tener resultados.

Su motivación es que según el artículo 50 de la Constitución habría un respaldo del Estado pues allí se establece que se garantizará el derecho a la atención especializada y gratuita a quienes sufran enfermedades catastróficas.

Sin embargo, Luz asegura que ha visitado el Ministerio de Salud y el de Inclusión Económica y Social pero la respuesta es: "vuelva otro día o no hallamos su carpeta". Así lo relata indignada, pues solo en medicinas gasta $750 al mes.

El procedimiento. El cirujano de trasplantes hepáticos, Frans Serpa, explica que un paciente con esta patología depende de cuánto aguante su hígado. "El 50% de los enfermos mueren antes de ser trasplantados", dice.

Según el Organismo Nacional de Trasplantes de Órganos y Tejidos (Ontot) se estima que solo en el hospital Carlos Andrade Marín, de Quito, son 200 las personas que necesitan esta intervención.

La razón, dice Serpa, es la falta de donantes e infraestructura para tal procedimiento. "La tasa de donación en el país es de uno por cada millón de habitantes. Además, un paciente requiere alrededor de $100 mil para cubrir los gastos de cirugía ($70 mil) más el tratamiento, los constantes exámenes y medicinas de por vida", señala.

Ahora Serpa trabaja en un proyecto para implementar este procedimiento en el hospital Eugenio Espejo, con una inversión aproximada de $200 mil para la primera fase. "Se han elaborado los protocolos de trasplantes, procuración de órganos y consentimientos firmados de los donantes", manifiesta.

Lo delicado de la cirugía es que se requieren al menos dos quirófanos implementados y personal que trabajen simultáneamente. "El hígado, luego de ser extraído puede durar hasta 12 horas en ser reimplantado porque necesita ser revascularizado. Pasado ese lapso el hígado ya no funciona", explica.

Para Serpa, lo que se necesita es crear una política de donación de órganos. "Esta hará la diferencia entre la vida y la muerte de una persona. De no ser así, Luz María podría ser parte de la estadística", enfatiza Serpa.

Al cierre de esta edición, familiares de Luz María dieron a conocer a Diario Hoy, que ella fue internada de urgencia en el hospital debido a complicaciones en su salud. (GM)

Hoy Ecuador - 01 de abril de 2009 - Leer la nota completa

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